Mudanza de la Ropa

En un traslado no todas las cosas que quieras llevarte puedes en ser llevadas de la misma manera. Por ejemplo, tus vasos no pueden guardarse como tus libros o el equipo de música no debe embalarse como un taburete, cada cosa tiene un procedimiento diferente.

Por ello, pensando precisamente en eso, he decidido mostrarte específicamente cómo hacer la mudanza de tu ropa, y es que se podría pensar que es sólo colocarla en bolsa y ya, pero no es tan sencillo.

Traslada tu ropa
Mudanza de la ropa: trucos - Freepik.com

¿Necesitas llevar toda tu ropa?


Antes de comenzar a guardar la ropa, es necesario que te cuestiones si debes llevar toda la que tienes contigo. Tal vez podrías ir escogiendo realmente lo que deseas llevarte a tu nuevo hogar.

Así que, lo primero será hacer una limpieza de armario. Son muchas las prendas que seguramente llevan años guardadas, y si no te las colocaste antes, ahora mucho menos lo vas hacer.

Yo soy de esas personas a la que sin darse cuenta, se le empieza a llenar un valioso espacio del armario con cierto tipo de prendas a las que llamo: “para el campo”. Es probable que el concepto te resulte familiar. Tal vez en tu caso sean “para pintar o para limpiar” y no es que sea mala idea, pero la verdad es que sólo necesitas una muda de ese tipo.

En otros casos puedes ser una de esas personas que digas de no tirar algo porque “está como nuevo” o que es mejor dejarlas por si acaso o cuando vuelvas a perder esos kilitos de más. Si tienes ropa que esté muy bien conservada pero que ya no te pones, lo mejor es donarla e incluso regalarla a tus amigos o familiares.

No es necesario que te engañes a ti mismo/a. En una mudanza lo mejor para ti es que cuanto menos tengas mejor. Así que aprovecha para deshacerte de peso muerto.

¿Dónde almacenar la ropa?


Donar la ropa que no uses - Freepik.com

Se podría pensar que lo mejor es hacerlo en cajas grandes. Es sumamente sencillo llevarlas y hasta identificarlas. La idea de colocar dentro las prendas sin que tener que preocuparse de nada más, puede parecer a priori, atractiva.

No obstante, esta es una decisión errónea que es muy común. Debemos pensar primero si es posible llevarla a la práctica, que sea la mejor forma de que todo ocupe lo menos posible y que también se factible trasladarla hasta en el coche.

Como norma general, te recomendaría que dejes los mejores contenedores para las prendas más delicadas y frágiles, y las peores para cualquier cosa que pueda ser aplastada sin contemplaciones y que no te importe que sufra daños o se ensucie en caso de que dicho contenedor se desgarre o rompa.

Dicho esto, veamos qué formas de almacenamiento temporal es el mejor en cada caso:

Cajas pequeñas

Las cajas de pequeño tamaño son más versátiles cuando hablamos de ropa. No ocupan mucho espacio, su rigidez está más garantizada y te permiten organizar mejor tus prendas. Por si fuera poco, hace posible que dediques las cajas más grandes al resto de enseres de tu hogar.

No es que puedan llevar mucha cosa por lo que es mejor dejarlas para ropa delicada o que no quieres que se ensucie como ropa interior, bañadores o tops.

Si quieres verlas, puedes acceder a la página de cajas de 50x30x30 de cartón.

Contenedores de plástico

Son una excelente opción para trasladar tu ropa. Si tu presupuesto te lo permite son magníficos contenedores que luego podrán seguir siendo usados para guardar la ropa que no sea de temporada.

Su rigidez les permite ser apilados con menor cuidado y aquellos modelos que tienen ruedas para meterlos debajo de la cama, permiten desplazarlos con comodidad.

Si quieres echarles un ojo, visita la página de cajas de plástico.

Cajas armarios

Esta es una opción más cara, pero excelente para llevar tus prendas más preciadas que no deban arrugarse, esta es una caja que incluye un perchero (una barra) que permite colgar la ropa en sus perchas.

Son magníficas alternativas para ser usadas como armario temporal mientras llegan todas tus cosas. Además, siempre que no estén expuestas a grandes pesos, guardarán tu ropa de forma impecable y si arrugas.

Especialmente pensadas para que tus valiosos abrigos, vestidos y trajes no sufran daño alguno durante el traslado.

Si te interesa, puedes echarles un vistazo en la sección de cajas de armario.

Bolsas de ropa

Estas bolsas de plástico están hechas de materiales relativamente resistentes (no en todos los casos) y disponen de algún tipo de cierre, habitualmente en forma de cremallera para sellar la ropa y evitar que entren insectos o suciedad.

No están específicamente pensadas para una mudanza, pero eso no significa que no sean buenas para ello. Además su utilidad no acaba al terminar el traslado ya que son perfectas para guardar ropa fuera de temporada.

Bolsas de ropa de vacío

Estas bolsas de plástico son un subtipo de las anteriores bolsas. Por norma general suelen estar fabricadas en un plástico más resistente y cuentan con una válvula que permite extraer el aire de su interior (normalmente mediante una aspiradora convencional).

Su principal ventaja es que la extracción del aire hace que las prendas reduzcan su volumen al mínimo ahorrando un valioso espacio en tu traslado.

Bolsas de basura (o de la compra)

Esta es la manera más económica y sencilla de trasladar tu ropa. Tan sólo debes colocar tu ropa dentro y listo.

Sin embargo, debes tener claro que se arrugará y que por más que hayas intentado tener un orden en su interior, lo más probable es que lleguen de cualquier modo.

Una de las ventajas de las bolsas de basuras es que al transportarlas en un camión o en un coche no ocuparán mucho espacio. Pueden ponerse en cualquier lugar sin miramientos. Sin embargo eso mismo hace que haya probabilidad de que sean machacadas, golpeadas y rasgadas. Si no es problema, adelante.

Por ello, te recomiendo llevar en ellas pantalones, shorts, ropa de cama, paños y todo aquello que sea pesado. Es decir, todo lo que sea resistente o que no importe mucho si se ve expuesto.

Maletas de viaje

Si ya las tienes en casa, ¿por qué no aprovechar algo que ya usas para guardar ropa en tus viajes? Es una manera disponible, sencilla y segura de llevar la ropa a tu nuevo hogar. Lo único que debes hacer es doblar tu ropa, de manera tal, que entre tanta como te coja.

Si la maleta además tiene ruedas, es tu día de suerte. Encima, te ahorrarás el inconveniente de tener que cargar con el peso.

Identificar y clasificar


Identificar y clasificar la ropa - Freepik.com

Ahora que ya sabes lo que vas a llevar, es el momento de clasificar la ropa.

Para empezar, prepara un bolso o una maleta en la que puedas guardar todo aquello que debas usar en el primer día. Durante el día de la mudanza, y en aquellos en los que todavía no tengas tu nueva casa preparada y la ropa esté arrugada y de cualquier forma, toda precaución es poca.

Esta será cómo tu maleta para sobrevivir los primeros días. Por eso, coloca mudas cómodas para cuando estés ordenando, ropa para usar luego del baño, también la ropa interior que necesites.

Después, conforme vayas cerrando contenedores, ve etiquetando cada caja, bolsa o maleta para indicar qué va en el interior. Para hacerlo debidamente, ten a mano cinta adhesiva, rotuladores, tijeras y hasta etiquetas para clasificar todo, esto hará más fácil desempaquetarlo después.

Mi última recomendación es que en cada contenedor sólo haya ropa de un tipo o de una persona. De este modo cualquiera podrá echar un vistazo rápido entre todo y saber qué cosa abrir para encontrar lo que busca y además permite llevar cada bolsa al cuarto adecuado.

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